EL KAJELO

El Kajelo es una danza de la cordillera mixta, la palabra Kajelo deriva de la voz aymara Qajho, que significa adolescente, se dice Qajho Huayna para decir muy joven, se baila en parejas de aire pastoril amoroso, machista, costumbrista, erótico, mágico, burlesco, litúrgico, satírico y muchas veces en forma de ritual.

Esta danza se baila en la zona de Pichacani, especialmente en los Carnavales. La manifestación de esta danza expresa sentimientos de amor que nace del joven andino el Kajelo en la conquista de la chola, en los trabajos pastoriles, con su óptimo charango encantado para lograr la conquista de su amada, si no llega a conquistarla esto llega a un rapto, arriesgándose a la tragedia de los destinos.

En los campos de la cordillera se ubican jóvenes cuya edad son de 15 años hasta más, los jóvenes varones son nombrados Hualaychu, y las mujeres Linlicha, los cuales ya han despertado y se hallan en plena edad del amor.

El Hualaychu es el joven atractivo y apasionado, montado en su caballo cabalgando días y noches, es fuerte y valiente, es idolatrado y es por quien suspiran las jóvenes. Por otro lado la Linlicha es la joven bonita y divertida, coqueta, por quien quedan enamorados muchos jóvenes, es ella quien insira en el Hualaychu muchos actos de destreza y nobleza.

El Qarabotas, vendría a ser el Hualaycho maduro, es el que lleva saco y pantalón grueso, con polainas en ambas piernas hasta los muslos, zapatos de suela gruesa como si fueran suecos en forma puntiaguda, chullo de color entero rojo o verde y un sombrero de lana de oveja. Es decir que con la falda levantada adelante, cubren su cuerpo musculoso, complementan su atuendo con un poncho amplio de alpaca color gris, negro o blanco, un chal grueso y largo que haga juego con el poncho y por supuesto el infaltable zurriago terciado sobre el hombro y la cadera.
La Linlicha lleva sombrero de copa redonda y falda volteada, una pollera que cubre la espalda hasta la cintura y un atado de lliclla de colores. En sus comienzos el baile fue llevado acabo con movimientos energéticos y muy rudos en el hombre, esta danza es realizada en parejas, al ritmo de un conjunto de instrumentos de cuerda, donde el charango es el instrumento más notorio e interpreta los sentimientos de amor, cariño y afecto. En conclusión el Kajelo es el baile del amor, del enamoramiento, el baile romántico y alegre que expresa los sentimientos profundos de la juventud que se baila en parejas.

Renato Sánchez